Después de años en los que los s hemos tenido que ser el conejillo de indias de las compañías, con llamadas a la hora de comer o en mitad de nuestra jornada laboral, o incluso mientras intentábamos echar una cabezada, el Gobierno por fin da un paso más en la lucha contra el spam telefónico.
Y lo hace con una medida que, aunque no pone fin para siempre a esta agresiva estrategia de publicidad, sí corta por lo sano uno de los métodos más utilizados.
Nueva ley contra el spam, ¿es el fin?
A partir de mañana, sábado 7 de junio, se prohíben las
Además, hay otras medidas interesantes que se activan junto a esta nueva norma. Por ejemplo, si una empresa te cuela una llamada comercial no deseada y, por error o insistencia, acabas aceptando un contrato, podrás solicitar su nulidad. Y eso es importante, porque muchas veces se juega con la presión o la confusión del momento. También se creará un registro de números autorizados: las operadoras sabrán desde qué teléfonos se puede llamar con fines comerciales, y bloquearán aquellos que no estén en la lista.
En definitiva, que nadie se haga ilusiones, porque las llamadas comerciales no van a desaparecer todavía, y menos de un día para otro. Así que sí, decir adiós a las llamadas spam será más fácil a partir del 7 de junio, pero no será un adiós definitivo, aunque sí nos dará toda la tranquilidad del mundo si cuando descolgamos el teléfono quien nos habla lo hace desde un número móvil.