El organismo tributario busca protegerse de las donaciones encubiertas y ha puesto el foco en las cuentas compartidas, tras detectar que puede ser un mecanismo utilizado en una gran cantidad de familias.
En muchas familias, las cuentas compartidas entre padres e hijos se han convertido en un excelente recurso para gestionar el dinero de los más pequeños de la casa hasta que tengan una cierta independencia económica. De este modo, podemos asignar la clásica paga e inculcar la cultura del ahorro sin que sea necesario acudir al cajero a sacar efectivo.
Pese a que no se trata de algo legal y los bancos siempre lo han permitido, ahora podríamos encontrarnos con problemas con Hacienda. Especialmente si sospecha que dichas cuentas se están utilizando como mecanismo de donación encubierta. Una situación que, en el caso de confirmarse, podría obligarnos a tener que afrontar una importante sanción.

Los bancos tiene la obligación de comunicar cualquier movimiento sospechoso
La Agencia Tributaria tiene cada vez más mecanismos de control para vigilar nuestros movimientos y detectar cualquier comportamiento sospechoso. Si a ello le sumamos que las entidades bancarias tienen la obligación de informar de cualquier movimiento de dinero o acción que llame su atención, se reúnen todos los ingredientes para que podamos recibir una sanción en el caso de que no cumplamos con la normativa vigente.
Es importante recordar que la AEAT actuaría de acuerdo a la Ley 29/1987 del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. En su artículo 4 expone que “Se presumirá la existencia de una transmisión lucrativa cuando de los registros fiscales (…) resultare la disminución del patrimonio de una persona y simultáneamente o con posterioridad (…) el incremento patrimonial correspondiente en el cónyuge, descendiente (…)”
Es decir, si un padre y su correspondiente hijo tienen una cuenta en común y ambos son titulares, en el caso de que el progenitor ingrese el dinero para el disfrutar de su hijo, la Agencia Tributaria podría considerarlo como donación encubierta. Y, por lo tanto, sería necesario tributar por dicha cantidad atendiendo al cuentas para menores. Con ellas, podemos hacer lo mismo que hacemos con una cuenta compartida, pero con una mayor diferenciación y trazabilidad sobre el dinero que los progenitores ceden a sus hijos.
Hacienda continúa dando pasos hacia delante con cada vez una mayor atención hacia los contribuyentes, controlando una gran cantidad de datos gracias a la adoptación de más tecnología y herramientas. Informarnos ante cualquier movimiento bancario que queramos realizar es clave para evitar estar expuestos a este tipo de sanciones.