Con el paso del tiempo, un efecto que tendemos a observar en nuestro coche es que notamos unos pequeños (o más grandes, depende) tirones que nos van diciendo que algo no va bien en el vehículo. Pero, ¿qué es lo que sucede y por qué ocurre esto? ¿Es fácil de solucionar?
Los tirones en el coche pueden acarrear problemas mayores
Hablamos de la que es una de las señales más molestas y que más dudas nos generan al volante. Esto es porque hacen que la
Acumulación de humedad
Si la humedad comienza a impregnar la tapa del distribuidor del coche, es un motivo más para que existan traqueteos molestos cuando pisamos el pie derecho.
Esto puede suceder con relativa facilidad cuando estamos aparcados a la intemperie en climas fríos y húmedos. La mejor manera de evitar este fenómeno es intentar aparcar en el lugar más cálido y seco que puedas encontrar. Una cubierta térmica también puede ayudar a reducir el riesgo de condensación cuando el refugio no es una opción y se espera un clima más frío.
Filtro del aire dañado
El filtro del aire es también una de las causas principales de los tirones en un coche. Este elemento es el encargado de que las partículas suspendidas en el aire no accedan al motor y lo estropeen.
Para evitar problemas es necesario cambiarlo cuando indique el fabricante ya que, si este no funciona correctamente, el aire no podrá circular con normalidad impidiendo que el oxígeno necesario para la combustión llegue al motor.
Deterioro de la bobina del motor
La bobina del motor del coche puede ser otro motivo de los tirones del coche. El deterioro de este componente se debe, principalmente, a que se conduce el motor muy revolucionado.
Es por esto que, si tu coche tiene más de una bobina y una de ellas está estropeada, el coche irá a tirones. En el caso de que solo tenga una bobina, no arrancará. Tu mecánico sabrá cómo arreglarlo.
Problemas en la inyección del combustible y válvula EGR
Al mismo tiempo, y en conjunto con el que puede ser el deterioro de la bobina del motor, que nuestro coche dé tirones puede deberse, también, a problemas en la inyección de combustible. Las causas pueden ser varias: inyectores en mal estado, válvula reguladora de caudal o bomba de inyección defectuosas…
Esto hace que, a la par, pueda verse afectada la que es la válvula EGR y que esta se halle en mal estado. Especialmente en los vehículos con motor diésel, esta válvula puede provocar falta de potencia en el motor e incluso que se ahogue.